Una Voz Para Dios

Este mes mi enfoque va a ser en la unidad. Unidad en familia, en el matrimonio, y unidad con el prójimo.

Sentí fuerte hablar sobre este tema. Aunque te confieso, temo no sea un tema muy popular. Sin embargo, mi deseo es ser obediente a lo que Dios pone en mi corazón.

Lo curioso fue que escogí este tema antes de saber que el Huracán Harvey devastaria nuestra ciudad. Antes del Huracán, las noticias en los Estados Unidos eran de riñas y peleas entre todo tipo de grupos.

Y el mensaje que se pudo ver durante todo el desastre del Huracán Harvey fue el poder de la unidad. Nuestra nación vio que en medio del desastre no importa si eres Republicano o Demócrata, blanco o negro, rico o pobre….sino que todos somos una creación.

Con eso quiero empezar esta serie. Todos somos creados por el mismo Dios. Y cada uno de nosotros tenemos la misma esencia. Fuimos creados a su imagen y semejanza (Génesis 1:27). Esta es la ligadura que nos une cuando dejamos que el amor reine en nosotros.

Para poder vivir en unidad como familia, como matrimonio y como sociedad tenemos que reconocer que necesitamos regresar a nuestro creador. Mientras no estemos unidos a Él, nada más puede tomar su lugar. Necesitamos estar en unidad con Dios. Cuando lo hacemos, milagros suceden, el perdón fluye, y el amor reina. Aquí te presento 3 pasos sencillos para llegar a la unidad con nuestro creador:

1-Necesitas Conocerlo

Juan 10:14-15 dice, “Así como Dios mi Padre me conoce, yo lo conozco a él; y de igual manera, yo conozco a mis seguidores y ellos me conocen a mí. Yo soy su buen pastor, y ellos son mis ovejas. Así como el buen pastor está dispuesto a morir para salvar a sus ovejas, también yo estoy dispuesto a morir para salvar a mis seguidores” (TLA). En este pasaje Jesús nos da una clave para llegar a la unidad con Dios. El dice que él conocía al Padre y que el Padre lo conocía a él. No podemos llegar a la unidad sin conocer. Cristo es el creador de todo (Colosenses 1:15-17). Si queremos vivir en unidad no podemos lograrlo al menos que lo conozcamos a él y si lo conocemos a él también conocemos a el Padre.

Sabes, me gusto esta version de la Biblia. En estos tiempos de tantas redes sociales, todos sabemos que es un “seguidor”. Jesús nos describe como sus “seguidores”. El dice en este pasaje que él conoce a sus seguidores y que ellos le conocen a él.

Hoy en día cuando queremos saber de algun producto vamos y “seguimos” esa compañía en las redes sociales. Estamos pendientes de sus anuncios, sus productos nuevos y respondemos con comentarios y likes. Estamos pendientes y deseamos conocer más. Creo que Dios desea esa misma expectativa y pasión por conocer más de él.

2-Necesitas Seguir Su Voz

Juan 10:27 dice, “Mis seguidores me conocen, y yo también los conozco a ellos. Son como las ovejas, que reconocen la voz de su pastor, y él las conoce a ellas. Mis seguidores me obedecen” (TLA). El ejemplo que Jesús da aquí es la de ovejas y su pastor. El dice que la oveja conoce la voz de su pastor.

Creo que esto es similar a como un hijo reconoce la voz de sus Padres. Te paso de niño que cuando no te lo esperabas escuchastes la dulce voz de tu Mama o Papa? Creo que eso tiene que ser la sensacion mas hermosa del mundo. Que paz nos trae escuchar una voz que amamos. Dios está tan presto para hablarnos. La pregunta es cual voz estas siguiendo?

A veces le damos más importancia a la voz de la duda o a lo popular o a la voz de la tradición cuando Dios está susurrando a nuestro oído lo que él desea que nosotros hagamos. Para llegar a la unidad tenemos que aprender a seguir su voz. A no ignorar ese sentir fuerte que nos guía siempre a la luz.

3-El Resultado Es La Unidad

Juan 10:30 dice, “Mi Padre y yo somos uno solo” (TLA). Qué afirmación! Jesús como ser humano, viviendo en la tierra, en un cuerpo como el tuyo y mío pudo vivir en unidad con el Padre Celestial. Aqui esta la formula: Conocer + Seguir la Voz = Unidad.

La unidad no se logra con decir palabras mágicas. La unidad viene al tener una relación con Dios. Una relación que conoce y quiere saber mas de el. Una relación en donde escuchamos su voz y la obedecemos. Cuando nos mantenemos conociendo más, escuchando y obedeciendo su voz, la unidad con nuestro creador se hace una realidad.

Sabes, creo que nunca vamos a acabar de conocer a Dios. Así como nunca dejamos de descubrir cosas sobre nuestro cónyuge o hijos. El ser uno con Dios es dinámico. Vamos creciendo en unidad con él, al conocerlo más.

Yo, a los 15 años sentada en una convencion de jovenes, sentí la voz de Dios. Sentí que ya no podía vivir mi fe a través de mis Padres. Supe que tenía una necesidad de conocer a Dios personalmente.

Hoy te pregunto a ti, cuántas veces has sentido la voz de Dios guiándote hacia el? El desea que tu te acerques para que ambos se conozcan. Y que mediante esa relación tú puedes identificar su voz. Que tu puedas seguir las indicaciones que el te quiere susurrar al oído. La unidad en nuestra vida comienza cuando somos uno con nuestro creador.

Siempre habrá voces que compiten por nuestra atención. Muchas causas que quieren “seguidores”. La paz y el amor que tanto deseamos no puede ser lleno con cosas buenas. Nuestra vida solo es llena cuando conocemos a nuestro creador y aprendemos a seguir su voz.

El dia que decidi seguir su voz mi vida cambió radicalmente. Nunca volví a ser igual. Dios desea que tu vida tenga armonía y unidad. El tiene planes buenos para ti (Jeremías 29:11). Únete a él! Su voz siempre te guiará a la luz. Siempre sera para bien.

Pregunta:

Una manera muy fácil de escuchar la voz de Dios es leyendo la Biblia. Habrá algún verso que te habla cada vez que lo lees? Comenta por favor.